RESEÑAS

PIKOLETOS

Ficha técnica:

Título: Pikoletos

Subtítulo: La derrota de la ETA y la élite de la Guardia Civil

Autor: Mateos, Juan José

Editorial: Arzalia ediciones

Año de publicación: 2022

ISBN: 8419018113

Páginas: 399

 

El autor, miembro de los GAR entre 1999 y 2005, nos cuenta a través de testimonios de compañeros y del suyo propio, la lucha de esta unidad especial contra la banda terrorista y criminal ETA desde principios de los 80 hasta su derrota social, política y policial en 2011.

Anteriormente había escrito en dos tomos Verdugos voluntarios, en 2017 y 18, pero en este Pikoletos se adentra en un tema poco tratado, del que el gran público, por razones obvias de seguridad, no sabía mucho.

El GAR, Grupo Antiterrorista Rural, más tarde cambiado a Grupos de Acción Rural, fue creado ad hoc en 1980 en lo peor de la ofensiva terrorista en Vascongadas y Navarra en particular, con asesinatos casi a diario en aquellos llamados Años de plomo.

A través de los valiosos testimonios de los protagonistas, el autor nos contará ( hasta donde se puede) el durísimo entrenamiento y las no menos duras condiciones en las que este puñado de valientes fue poniendo contra las cuerdas a la ETA, en unos años de sufrimiento y dolor, en los que finalmente, gracias a ellos y al resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Ejército y sociedad, se pudo derrotar a la serpiente terrorista.

Si hoy en día, cualquier persona puede circular por todo el territorio nacional sin temor a la violencia etarra ( sin entrar a valorar otro tipo de violencia, terrorismo y amenazas) es gracias a ellos, a la colaboración con Francia, aunque llegase tarde, y al hartazgo de la sociedad vasca en particular y española en general.

El propio autor fue victima de un atentado en el aeropuerto de Reus. Esto le motivó a ingresar en el GAR, pero también a la larga, le obligó por cuestiones médicas a abandonar primero la exigente vida en el GAR y posteriormente a su amada Guardia Civil, con el correspondiente dolor y pena que a cualquiera nos aquejaría el abandonar nuestra vocación.

En la actualidad, el continúa la lucha a su manera: ayudando a las víctimas, visitando las tumbas y a los familiares de los compañeros caídos, en definitiva siendo una voz predicadora en el desierto actual en que nos encontramos, para que la barbarie y sinrazón etarra no caiga en el olvido y a las generaciones que no lo vivieron y sufrieron, no les cuenten falsedades históricas tergiversadas. Gracias, tocayo.